Enviado por sov-madrid el Mar, 16/02/2010 - 01:00.
La dueña del restaurante "La Toja", sito en la calle Mayor de Madrid, sigue sin dar la cara; nuestro compañero Pedro sin cobrar sus nóminas; nosotros concentrándonos frente al local, como el pasado domingo 7. Agentes de azul vinieron a vernos, como de costumbre. El apoyo de los transeúntes fue lo más notorio.
En el mediodía del pasado domingo la CNT se hizo presente en la Plaza Mayor nuevamente. Desplegamos nuestra pancarta que resumía los cantos que entonamos a los largo de la hora y media que permanecimos en el lugar: "La Toja, paga lo que debes!" Distribuimos panfletos informativos a quienes pasaban por allí y a cada persona que, atraída por nuestras voces, se acercaba a preguntar qué era lo que ocurría en el local hostelero.
No fueron pocos los que recordaban otro conflicto de iguales características acontecido hace dos años. El restaurante La Toja parece ser reconocido no por sus mariscos sino por explotar a los trabajadores como en la época de la esclavitud. No se nos ocurre otra comparación, ya que en este sitio las/os empleadas/os llevan seis meses desempeñando sus funciones sin recibir beneficio a cambio. Una de las partes firmantes del contrato no está cumpliendo con lo pactado. En resumen, Pedro y el resto de los trabajadores continúan trabajando gratis.
En esta jornada contamos con la solidaridad de no pocas personas que, al tomar conocimiento de la situación, decidían no consumir en el restaurante. La presencia policial, que no fue tan notoria como en anteriores concentraciones, se sumó al lugar, más no al reclamo. Uno de los agentes identificó a uno de nuestros compañeros pero, en esta ocasión, no nos sugirieron el cese de nuestro reclamo.
La CNT volverá al restaurante "La Toja" todas las veces que haga falta. No nos cansaremos de reclamar por lo justo, como en este caso, el pago de lo adeudado a nuestro compañero Pedro. Sabemos que la unión, la solidaridad, la acción allí donde está el conflicto son nuestras armas. Las excusas que pretenden justificar la vulneración de nuestros derechos, amparadas en la archigastada situación de crisis, no nos sirven.
Nuevamente (y van...): ¡"LA TOJA", PAGA LO QUE DEBES!
